A Relax Place
Se llamaban Don Walsh, ex teniente de la Armada de EEUU, y Jacques Piccard, oceanógrafo suizo. Y fueron los primeros en llegar al punto más profundo de la corteza terrestre: la fosa de las Marianas.
Hoy el nombre de James Cameron pasará a la historia como lo hicieran el de Piccard y Walsh al llegar hasta los 10,994 metros en los que termina la fosa. 50 años después el director de cine ha logrado recuperar el mito.
Cuatro equipos competían por ser los primeros en conseguirlo: el directo y su 'Deepsea Challenger', el submarino monoplaza con el que ha llegado al fondo; la expedición 'Triton Subamarines', con la que viajarían tres hombres; el 'Doer Submarine, apoyado por el presidente de Google, Eric Schmid; y el 'Virgin Submarine', construido en un principio para el millonario Steve Fossett, pero que tras su muerte pasó a ser el objetivo de otro millonario, Chris Wehls.
Sin embargo, ha sido el Deepsea Challenger, patrocinado por 'National Geographic', quien ha alcanzado la meta antes que nadie y con éxito. Cameron se introducía anoche en el submarino al grito de 'Liberar, liberar, liberar'. Después de dos horas, el cineasta tocaba las profundidades de la Tierra.
Ha estado tres horas explorando un fondo donde se cree que hay 750,000 especies marinas que no han sido formalmente catalogas por la ciencia. La nave equipada con decenas de cámaras ha podido grabar todo lo que Cameron se ha encontrado a su paso.
"Ha sido la realización de un sueño", dijo Cameron a la BBC antes subirse a la nave. "La gente viajaba a la Luna, y Cousteau exploraba el océano. Eso es con lo que yo crecí, lo que marcó mi infancia", añadía.
Como un Julio Verne del siglo XXI, el director cumplía no sólo su sueño si no el de muchos científicos. La Fosa de las Marianas es uno de los misterios que le queda al hombre por desvelar. Descubierta en 1870 cuando un navío intentó medir la profundidad del Pacífico mediante el sondeo con lastre atado a una cuerda, las expediciones para conquistar las profundidades del mar han sido abundantes e infructuosas.
En ella se descubrió el calamar gigante Architeuthis, una especie desconocida de lenguado, biodiversidad nunca vista hasta entonces... Le convertía en uno de los lugares más enigmáticos de la Tierra. Fue en 1960 cuando el batiscafo Trieste gobernado por Walsh y Piccard alcanzó hasta los 10,900 metros de profundidad.
Veinte minutos estuvieron en el fondo donde pudieron observar pequeños peces. Algo que les sorprendió por la alta presión que hay en el fondo que es 1,000 veces mayor que la que se experimenta en la superficie de la Tierra, unos 110,000 kilopascales (1.12 Ton/cm2). Fueron los últimos y los únicos hasta hoy.
Cameron no ha desvelado nada de lo que ha visto. Todo sigue siendo un misterio. Lo único que ha escrito a través de Twitter ha sido: "Acabo de llegar a lo más profundo del océano. Tocar fondo nunca fue tan bueno. No puedo esperar para contar lo que estoy viendo".
El interés es máximo ya que los organismos que habitan en esas profundidades (sin luz, con alta presión y con temperaturas de entre 0 y 2 grados centígrados) habrán desarrollado adaptaciones impensables.
Pero no sólo la fauna que puede albergar tan enigmático lugar suscita interés. La expedición de Cameron también servirá para analizar la formación de terremotos y el cambio climático.
La materia orgánica de la flora y fauna muerta se queda en las paredes de la fosa. Un estudio publicado el año pasado desveló que, debido a esto, más carbono se acumula en el fondo de las fosas que en otras partes del océano.
Y esto sugiere que las profundidades del mar podrían desempeñar un papel más importante en el ciclo del carbono, y por lo tanto en la regulación del clima de la Tierra.
Tengo 39 años y he estado trabajando a bordo de los pesqueros durante 17 años. Vivo en Murmansk, Rusia. Es un gran puerto y es por eso que me inscribí en la Universidad de Marina después de la escuela. Mi especialización tiene mucho que ver con la tecnología de pesca. Sé cómo preparar el pescado para congelarlo y entregarlo al cliente.
Desde hace 17 años Roman Fedortsov, un ruso, se ha dedicado a la pesca y también a dar a conocer a peces que parecen parte de la utilería de una película, pero son totalmente reales y algunos, terroríficos.
A través de las redes sociales ha compartido las especies más raras que se ha encontrado y eso lo ha convertido en una sensación, aunque algunos le han pedido que no lo haga, pues ver a estas criaturas les causa pesadillas.
La mayoría de estas especies las ha encontrado en los mares de Noruega y de Barents; otras, en el océano Atlántico mientras pesca otro tipo de peces, como el bacalao o el arenque.
Su jornada laboral es de 6×6, es decir, trabaja seis horas y luego descansa otras seis, y así sucesivamente, y también está en la fábrica procesadora de pescado donde es el encargado del control de calidad. Así que ahí se da cuenta de todos los “monstruos” que se han colado en las redes y que muy pocos aceptarían en su comida.
Decidí crear cuentas de redes sociales porque muchas personas no tienen idea de cómo se ven algunos de los peces. Estoy constantemente impresionado por la aparición de algunos peces de aguas profundas y quiero compartir mis experiencias con otras personas.
Roman aclara que nunca se ha asustado con alguna de las especies que ha encontrado, al contrario, se maravilla cada vez que encuentra una nueva y cada vez más rara.
Y es que, como se dice por ahí, “conocemos más de la superficie de Marte que del fondo del océano”, y parece que esto es verdad.
La mayoría de estos animalitos viven a una profundidad entre 200 y 1,000 metros, por ello algunas de sus características en la forma y los colores.
Una galería que puede ser inspiración para directores de película y demás artistas… si es que quieren trabajar con criaturas terroríficas del mar.
La expedición del buque Falkor explorando la costa del Pacífico en Costa Rica duró varias semanas. Allí, los científicos del Schmidt Ocean Insitute recopilaron información acerca de la influencia de los humanos en el océano, de la cantidad de basura que se acumula a 3500 metros de profundidad y de las increíbles criaturas que no conocemos pero que existen en el fondo del mar.
Las imágenes de estas criaturas fueron captadas con un ROV sumergible entre Costa Rica y la Isla del Coco, zonas que nunca antes habían sido exploradas. El jefe científico de la expedición, Erik Cordes, dijo: “Cada vez que bajamos a las profundidades del océano descubrimos algo nuevo”, y agregó que “algo que no hemos visto, una nueva especie o algún tipo de hábitat totalmente nuevo. No hay nada como la emoción de mirar algo que sabes que es nuevo y tratar de descubrir cómo funciona esta nueva pieza de nuestro planeta”.
Además de la basura acumulada, se descubrieron cuatro nuevas especies de coral y seis nuevas especies de animales, tan extrañas que parecen de otro mundo. Las imágenes fueron tomadas en el fondo del Pacífico, y estas son algunas de las criaturas encontradas:
los poliquetos son los anélidos más numerosos y primitivos
una holoturia, conocida vulgarmente como pepino de mar
un pez lophiiforme de la familia del rape
un Grimpoteuthis, un género de mosluscos conocidos como “pulpo Dumbo”
Xenoturbella, un misterioso animal que ha sido relacionado con los moluscos
Comentarios recientes
25.11 | 00:55
Jorge gracias, esa es la idea de este blog, compartir datos históricos y otros divertidos, siempre con la idea de cultura
16.11 | 05:32
Verdaderamente ilustrativo, gracias por compartir estas enseñanzas.
28.10 | 14:04
Leí hace años de una mujer a la que le habian desaparecido varios empastes y tenia esos dientes sanos.
Además, existen una serie de fotografias, de logos en vehículos, que atestiguan la veracidad.
23.10 | 15:49
Los Griegos ganaton a los Atlantes-Iberos.