A Relax Place
Nació el 12 de septiembre de 1913, en Danville, Alabama.
Nieto de esclavos, fue el décimo de once hermanos.
A los siete años estuvo al borde de la muerte por una neumonía. Recogió algodón con sus padres y hermanos.
Posteriormente la familia se trasladó a Cleveland. Trabajó como dependiente, cargador de camiones y ayudante de zapatero.
Se inició en el atletismo con quince años de edad a raíz de una visita que hiciera a su colegio el campeón olímpico de 100 metros en Amberes 20, Charles Paddock.
El entrenador Charlie Riley se ofreció a entrenarle por las mañanas para que pudiera seguir trabajando en las tardes.
Por entonces destacó en el salto de longitud, la carrera de cien metros y la de 220 yardas. En tan sólo 45 minutos batía cuatro records mundiales durante una competición estatal celebrada en Michigan. Y lo hacía descansando sólo entre nueve y 15 minutos entre prueba y prueba: 100 metros lisos (9.4 segundos), salto de longitud (8.13 metros), 220 yardas (20.3 segundos) y 220 yardas vallas (22.6 segundos), convirtiéndose en la primera persona que bajaba de los 23 segundos en esta última prueba.
En 1936 en los Juegos Olímpicos de Berlín consiguió cuatro medallas de oro, batiendo tres nuevos récords olímpicos en 200 m, salto de longitud (8.05 m) y 4 × 100 relevos (39.8 s), 2 mundiales (200 m y 4 × 100 relevos) e igualó el récord olímpico anterior de los 100 m (10.3 s). Adolf Hitler se negó a reconocer sus victorias olímpicas debido al color de su piel. El führer no aplaudía las medallas de Owens y sí las de los atletas blancos. Cuando un miembro del comité le advirtió de que sería conveniente de que aplaudiera a todos por igual o a ningún atleta, Hitler optó por no aplaudir a nadie. «Cuando volví a mi país natal, después de todas las historias sobre Hitler, no pude viajar en la parte delantera del autobús. Volví a la puerta de atrás. No podía vivir donde quería. No fui invitado a estrechar la mano de Hitler, pero tampoco fui invitado a la Casa Blanca a dar la mano al Presidente», asegura sin embargo Jesse Owens años después.
Después de los juegos, tuvo además que volver a su trabajo de botones en el hotel Waldorf-Astoria, organizar espectáculos en los que corría contra caballos o a montar una lavandería con un socio que terminó estafándole para seguir sacando a su familia adelante. Owens participó de forma muy activa en programas de atletismo para la juventud. Tras su retirada, fundó su propia empresa de relaciones públicas. En 1970 se publicó su autobiografía, The Jesse Owens Story. Casado con Ruth Solomon, con la que tendría tres hijas, Gloria, Beverly y Marlene.
Fumador empedernido, Owens murió en Tucson el 31 de marzo de 1980 víctima de un cáncer de pulmón. Fue enterrado en el cementerio Oak Woods de Chicago.
Comentarios recientes
25.11 | 00:55
Jorge gracias, esa es la idea de este blog, compartir datos históricos y otros divertidos, siempre con la idea de cultura
16.11 | 05:32
Verdaderamente ilustrativo, gracias por compartir estas enseñanzas.
28.10 | 14:04
Leí hace años de una mujer a la que le habian desaparecido varios empastes y tenia esos dientes sanos.
Además, existen una serie de fotografias, de logos en vehículos, que atestiguan la veracidad.
23.10 | 15:49
Los Griegos ganaton a los Atlantes-Iberos.