A Relax Place
Miguel Hidalgo y Costilla contaba con una inteligencia superior a sus contemporáneos. Hablaba francés, italiano, tarasco, otomí y náhuatl. Estudioso de letras, artes, ciencia, economía, política y teología. Era apodado “el zorro” por su inteligencia para argumentar y resolver disputas. Como párroco, fue solidario y caritativo con los indígenas, estableció talleres para desarrollar en ellos diversos oficios y llegó a pagar sus deudas. Erudito, carismático y encantador, se ganaba el cariño y la admiración de quienes lo rodeaban.
Movido por sus ideales de libertad, abandonó el púlpito para invitar al pueblo a luchar por la Independencia. El valor y el arrojo con el que encabezó la lucha lo convirtieron en “el padre de la Patria”.
La manera improvisada en que dio inicio el movimiento de Independencia provocó que Hidalgo aceptara en sus filas a todo aquel que quisiera hacerlo, incluyendo criminales. Toleró el saqueo, la rapiña y el asesinato argumentando que el rigor volvería odiosa la causa para los rebeldes y que la posibilidad de saqueo y de venganza era para ellos un aliciente.
Hidalgo, sigilosamente y sin formarles proceso alguno, ordenó el asesinato de más de 300 prisioneros españoles, quienes eran degollados por José Marroquín, ex convicto liberado y mozo a su servicio.
Pocos lo saben pero Hidalgo era primo de Agustín de Iturbide, sin embargo este último, si bien estaba de acuerdo con las ideas libertarias de la Nueva España, no estaba de acuerdo en los métodos que usaron los insurrectos que derramaron sangre de mexicanos que no compartian sus ideales y como mexicanos me refiero a criollos, mestizos e indios, que en la revuelta fueron muertos.
En la toma de la alhondiga de granaditas las huestes de Hidalgo mataron y violaron a hombres mujeres y niños e incluso les buscaban bajo la ropa la "cola", porque se decia que los criollos y/o españoles eran diablos, fue una verdadera carniceria permitida por el "Padre de la Patria", por eso la persecución de Iturbide y de Calleja fue tan implacable con ese movimiento.
El carisma y obstinación del cura Hidalgo causaron graves disgustos entre los principales jefes insurgentes. Mientras se autoproclamaba “Alteza Serenísima” en Guadalajara, le negó ayuda a Allende para recuperar Guanajuato quien reclamó su egoísmo y acusó de traidor. Sus desavenencias llegaron a tal grado que Allende tuvo claras intenciones de envenenarlo.
La soberbia desatada por el vértigo de las alturas le costó el disgusto de los demás jefes insurgentes, y tras el fracaso en la batalla de Puente Calderón, fue despojado del mando.
Comentarios recientes
25.11 | 00:55
Jorge gracias, esa es la idea de este blog, compartir datos históricos y otros divertidos, siempre con la idea de cultura
16.11 | 05:32
Verdaderamente ilustrativo, gracias por compartir estas enseñanzas.
28.10 | 14:04
Leí hace años de una mujer a la que le habian desaparecido varios empastes y tenia esos dientes sanos.
Además, existen una serie de fotografias, de logos en vehículos, que atestiguan la veracidad.
23.10 | 15:49
Los Griegos ganaton a los Atlantes-Iberos.